Coneceptos de recuperación para la adaptación y el entrenamiento muscular en el fútbol

ESFUERZO PERCIBIDO.

Hemos visto, a través de los últimos años, cambios importantes en los protocolos de entrenamiento físico – atlético, de acuerdo a las mas recientes informaciones bibliograficas y el desarrollo tecnológico irrefrenable. Por la misma necesidad acompaña este proceso el área de medicina deportiva. ¿Que es lo quiero decir con esto? Al estar hablando de entrenamiento físico estamos involucrando componentes neurales, celulares, hormonales y esqueléticos, cada cual en su debida proporción. Al entrenar estos componentes siempre estarán buscando una adaptación para mejores resultados y para eso los profesionales estarán apoyándose básicamente en la fisiología, neurofisiología, bioquímica y biomecánica (viscoelasticidad) del entrenamiento.

Es de gran importancia saber para cual deporte estaremos trabajando y tener un perfil, dentro de las materias ya citadas, de quien estaremos trabajando. En este caso hablemos de fútbol. Deporte de esfuerzo mixto y duración variable (Borg G; Human Kinetics – 2000 (Cap.13 -101). Varios autores ya citan el trabajo de adaptación muscular a través de cargas mixtas intermitentes para una mejor respuesta de las fibras lentas al esfuerzo máximo y la de contracción rápida para una mejor recuperación, como es el caso de Cappa D. (Entrenamiento De Potencia Muscular – 2000), Bansgsbo J. (Fisiología Del Fútbol – 1994), Bosco, Cometti, Bompa (Entrenamiento Para La Potencia en el Fútbol – 2003) entre otros.

Ya teniendo una buena base de datos del grupo con lo cual vas a trabajar y un protocolo de trabajo establecido, ya sabemos los tipos de respuestas que podemos llegar a tener. Dolor muscular tardío, fatigas, ciclo dolor espasmo, en donde hay una importante concentración de acetilcolina, micro traumas musculares, fascitis musculares (Askling AM & Colbs; AJSM PreView Dic, 14 de 2006) en una determinada zona muscular, por lo regular en musculaturas biarticulates en su zona de carga o de stress. Hasta mismo pequeños desgarres musculares, y no hay porque preocuparse, debido a que también es un proceso de adaptación muscular.

De acuerdo a Maugan R, Gleeson M y Greenhaff PL (Bioquímica Del Ejercicio y Del Entrenamiento – 2000) las lesiones en las fibras musculares durante el ejercicio también pueden producir un estimulo de adaptación debido a que elevan la concentración del factor de crecimiento especifico del músculo, liberados por las fibras degeneradas aunado con la perdida de la inhibición del contacto entre las células satélites y las fibras musculares vivas subyacentes en las primeras 24h de la lesión. La fatiga muscular, también es considerada un importante dato de adaptación muscular, debido a que se lleva a cabo en su gran mayoría por desbalances bioquímicos y mecánicos en el músculo.

Bueno, ¿en donde entra entonces los conceptos de recuperación que pueden, y deben colaborar en un protocolo de entrenamiento físico? En la programación, protocolo de trabajo. En los macro, mezo y microciclos, de acuerdo al calendario de cada quien. . Seria de mucha ayuda que cuando ya estuviera establecido todo el protocolo, pudiera sentarse los profesionales directamente involucrados en todo lo que involucra la salud del jugador, en este caso el medico, el fisiólogo, el fisioterapeuta y el principal responsable por el trabajo, el preparador físico. Nosotros estaríamos informados de todo y así podríamos establecer un protocolo de recuperación activa en que pudiéramos recuperar el jugador de tal manera que pueda rendir mejor en el trabajo siguiente.

Por ejemplo: Supongamos que hubo un partido de visitante, en que hubo traslado de regreso en camión, avión o ambos, este jugador o el grupo encontró, situaciones bastantes adversas, como el mal estado de la cancha, clima, intensidad del partido, resultado y etc.……sabemos que los grupos musculares involucrados en el deporte están bastante desgastados y que hay un desgaste metabólico, que una recuperación pasiva se lleva a cabo por lo menos en 36h (dolor muscular tardío).

Ayudaría mucho un consumo inmediato de electrólitos y glucosa a través de alimentos, que pos competencia son de gran importancia tanto cuanto los de pre competencia, antioxidantes, criomasaje, la hipotermia, estiramientos pasivos, un trabajo activo…… cuando todo esto fuera posible de acuerdo a la logística del club. En una segunda etapa un buen trabajo de gimnasio, dirigido, especifico, antagónico al esfuerzo muscular, de preferencia con carga variada o piramidal buscando ampliar la vascularizacion periférica y mejorar la densidad capilar, seguido de una trabajo activo respetando los principios mecánicos del esfuerzo muscular previo.

Estos serian básicamente los conceptos de recuperación activa. Recuperar, equilibrar, metabolitamente lo mas pronto posible y respetar la mecánica muscular del esfuerzo. De lo que hemos visto y vivido en los últimos años en el fútbol, no nos queda de otra: Entrenar la recuperación. Recuperar, rehabilitar entrenando (escala del esfuerzo percibido de BORG) e intentar hacer conciencia del “entrenamiento invisible”. Espero que les guste. Hasta pronto.

Carlos Henrique A. Peçanha, FT Club de Futbol Puebla FC Fisiocenter – Puebla, México (2010-02-24)