Rubens Valenzuela, Preparación Física en el Fútbol Entrenamiento deportivo, artículos sobre preparación física en el fútbol, trabajos prácticos.
El rival interior, revista de la Unam., otros artículos y aporte personal.
Las emociones se pueden definir como una predisposición a actuar de una manera específica ante situaciones y estímulos específicos.
La Agresividad sería una cadena de conductas en las cuales se involucra conductas de defensa, ataque, lucha y huida.
La VIOLENCIA la podemos definir como cualquier acción motora o verbal cuya intención es causar daño directa o indirectamente a otra persona.
LA IRA es la agresividad liberada sin sublimación ni encauzamiento. Suele estar asociada a la impotencia y al descontrol.
La virtud positiva es la templanza y la determinación.
Hay que saber perder para poder ganar.
El concepto valentía y tenacidad (hombría) que se refleja en las reacciones violentas de los jugadores, pone a prueba o estimula el trabajo de sicólogo del deporte para solucionar el perder el control, enojarse o “sacarse” que son manifestaciones de impotencia. Muchas veces los integrantes del cuerpo técnico no mandamos mensajes claros a los jugadores porque podemos valorar actitudes como: “me enojé, me sacaron, no me pude controlar.” Es decir “festejamos” el triunfo de los arranques en detrimento de su capacidad por controlarse y de la estabilidad mental en el juego.
Nunca debemos fomentar la violencia como una estrategia de juego, pues el nivel de enojo impide concentrarse y, todo el tiempo que se está enojado, se está desconcentrado.
Habilidad de manejar la presión:
La autoconfianza
El aumentar las emociones positivas.
La concentración.
La motivación
Colaboran para que el jugador se relaje mentalmente y no se crea un entorno a sí mismo un estado de presión sobre lo que sucede a su alrededor.
Las decisiones impulsivas y/o apresuradas se reflejan casi siempre después cuando ya es tarde y suelen ser muy costosas. La prevención parece ser la solución.
Debemos tener en cuenta que la ansiedad, la bronca, el fastidio, el estrés y las presiones pueden llevar a un futbolista no agresivo a una agresión inusitada.
“DIME COMO MANEJAS LAS SITUACIONES DE TENSIÓN Y TE DIRÉ QUIEN ERES”.
El momento del cierre del partido es una de los de mayor tensión y es evidente que hace falta un resto de fuerza psíquica para poder hacerlo, de la misma forma en que se necesita un resto de fuerza física en el embalaje de maratón, remo o ciclismo para la definición de los momentos finales. Un campeón siempre tiene un resto de potencia psíquica que le permite soportar la fuerte tensión de definición.
Aprender a sentir pasión y emociones diversas, a controlarlas, dosificarlas e instrumentarlas de acuerdo a cada situación en particular es uno de los aprendizajes más bellos que nos brinda el deporte. Pero si se salen de cauce, estas hermosas vivencias emocionales pueden volverse en contra del sujeto en momentos claves y volverse una pesadilla donde muchos sienten ganas de abandonar el deporte.
Se identificaron 8 CARACTERISTICAS ESPECIFICAS QUE SE DERIVAN DE UNA EJECUCIÓN DE ALTO NIVEL. ELLAS SON:
Relajado mentalmente
Relajado físicamente.
Confiado / optimista.
Centrado en el presente.
Cargado de energía.
Conciencia extraordinaria
Bajo control.
Separarse el medio ambiente.
De esto se desprende la importancia del control de la presión. Para ello se necesitan algunas estrategias tales como:
Mensajes claros, sin dobles discursos, por parte de los entrenadores.
Padres que observen la competencia tranquilos, sin agresiones verbales ni gestuales ni a propios ni a extraños
Aprender a aceptar que existen al menos 20 obstáculos por superar que pueden suceder en una competencia y entrenarse para estar preparado para “todo”.
Entrenar la concentración bajo presión.
Aprender a utilizar las auto- verbalizaciones y el auto- diálogo.
Acentuar el disfrute y el rescate del placer lúdico aun en el alto rendimiento.
SON ALGUNAS DE ELLAS.
