Rubens Valenzuela, Preparación Física en el Fútbol Entrenamiento deportivo, artículos sobre preparación física en el fútbol, trabajos prácticos.
Creo que somos igual de responsables en el éxito y en el fracaso, digo “somos” sin olvidarnos que el entrenador está por encima de todo el cuerpo técnico.
También digo somos porque no solo creo en la fidelidad en el mismo sino y sobre todo debe contener riqueza y variedad de caracteres, personalidad y bagaje profesional, ha de estar integrado por personas analíticas, racionales y lógicas para gestionar datos o estadísticas que faciliten la toma de decisiones, y por otro lado se requieren personas que sean intuitivas, empáticas y con inteligencia emocional, para procurar ese pegamento que cierra las fisuras que se puedan producir durante la temporada.
Si fuimos “culpables” de salir campeones somos igual de culpables de la mala o pésima campaña. Porque ante la derrota surge la trampa y la culpa pasa a ser de la desatención o el error de los jugadores y si es así que en el éxito es por la inteligencia y talento de los jugadores y no por el trabajo del cuerpo técnico.
Somos los que armamos o aceptamos un plantel, somos los que los entrenamos a diario, somos los que ponemos y sacamos a los jugadores, somos los que responsables de saber “manejar” a un grupo y a cada uno de sus integrantes para alentarlos, concentrarlos, exigirles, estimularlos, etc., somos los responsables de enseñar el juego y al mismo tiempo un estilo de vida, somos los que ponemos las cargas y las jugadas de estrategia y sistemas de juego y sobre todo últimamente de “aceptar” y “tolerar” un montón de situaciones que al final por ese mismo motivo nos quita del lugar de trabajo.
Las grandes mentes discuten las ideas; las mentes promedio discuten los acontecimientos; las mentes pequeñas discuten con las personas.
Por este motivo creo debemos estar continuamente actualizándonos, aprendiendo siempre, no sobrevalorar nuestras propias capacidades, tener resiliencia que es la capacidad para adaptarse y superar la adversidad, para volver a levantarse tras una derrota y salir con un aprendizaje de ella, tener hábitos de éxito, poner pasión constantemente y adaptarse al lugar donde te toca estar, ya sea en la metodología y sistemas de juego. Valorar y exigir a todo el cuerpo técnico si así lo fuera.
Sin continuo crecimiento y perseverancia, palabras como mejora, logro y éxito no tienen significado.
