¿Que trabaja la psicología del deporte?

Como ya se ha señalado en otros artículos, el trabajo interdisciplinario hoy en día es una necesidad dentro de un trabajo deportivo profesional. A este respecto, gracias a investigaciones y al trabajo científico, se ha visto que la psicología deportiva es una rama que debe estar presente en este trabajo y aunque la inclusión de estos profesionales a este trabajo sigue siendo lenta, cada día son más los psicólogos del deporte que nos encontramos trabajando en instituciones deportivas.

En este artículo lo que se busca es mostrar algunos aspectos que se pueden trabajar en un trabajo psicológico con equipos deportivos, señalando el énfasis en algunos aspectos dependiendo del momento de la temporada en que se encuentren, para esto dividiremos la temporada en: período de entrenamiento general o pre-temporada, período de competición menor y período de competición mayor. En una primera etapa, será importante enfatizar en aspectos como pueden ser la cohesión de grupo o la motivación; es importante aprovechar este período para realizar dinámicas, actividades de conocimiento entre el grupo, así como trabajar en cuáles son las expectativas del grupo así como sus objetivos, tanto de manera individual, como de manera colectiva, y registrarlos de manera escrita para tener la forma de irlos evaluando.

De igual modo la motivación en este período juega un papel fundamental, pues posteriormente la propia competición dará la motivación; es por eso que es importante tener actividades variadas, así como la posibilidad de cambiar de escenarios (es decir, no tener siempre los entrenamientos en el mismo lugar). En una segunda etapa, cuando ya la competición ha iniciado, se buscará dar énfasis a aspectos como la auto-confianza y el nivel de activación. La situación de competición nos dará una visión “más real” de la reacción y actitud de los deportistas ante la presión, por lo que el inicio de la temporada es un buen momento para trabajar la confianza, así como enseñarles a mantener un nivel de activación ideal, es decir, ni muy relajados ni muy activados, sino que el deportista logre percibirse en qué estado de activación es en el que puede rendir mejor.

Finalmente, ya cuando la competición esté avanzada, se buscará enfatizar en el control de estrés y la concentración, ya que son 2 factores que a esas alturas resultan indispensables, pues los deportistas están sometidos a grandes cargas de presión y tienen que saber trabajar con ella e incluso aprovecharla como agente motivacional para poder rendir mejor. De igual modo, es una etapa en la que la carga física de trabajo ya es alta y esto puede provocar fatiga y falta de atención y concentración, por lo que esto se deberá trabajar de manera puntual con los deportistas para mantener un alto nivel de concentración incluso en situaciones de cansancio.

Con esto no se quiere decir que estos factores sean los únicos que se trabajan ni que solamente se puedan trabajar en esos períodos, simplemente es una recomendación por etapas para una planeación del trabajo psicológico.

Por Ricardo Virués Macías
Master en Psicología de la Actividad Física y el Deporte por la Universidad Autónoma de Madrid.